Vaya, estoy fatal. Lo bueno es he visto a Chris. Chris es el chico más popular del Instituto. ¡Y el más solicitado! Muchas chicas están por él. Lo mío es un secreto. Solo Lizz, mi mejor amiga, sabe que me gusta Chris.
Lo malo es que el sabe perfectamente que yo voy en autobus. Debo de haberle parecido una estúpida cuando me vio pasar... En fin. Las clases se me han pasado volando, y me rugía el estómago: Había salido tan temprano que no me dio tiempo a desayunar, y de todas formas la comida de la cafetería no es para demasiado alivio.
-¡Eh! -me gritó Marc, mi mejor amigo- ¡Tierra llamando a Alex!
Sonreí. Marc no paraba de hacer tonterías. Sí, yo soy Alex tengo dieciseis años: de pelo negro y ojos negro, ah, y la belleza brilla por su ausencia. En mi mesa estábamos sentados Marc, Danielle y Alison (que son gemelas), Jess, Mike y Jack. Además de Lizz, claro. Ella le dio un golpe con el codo.
-Eh, mira para atrás -la susurró Lizz.
-¿Qué pasa?
Se giró y vio a Chris. ¡La había estado mirando! No pudo evitar sonreír, y Lizz soltó una risita, aunque volvimos de inmediato a la conversación.
Lizz y Marc eran mis mejores amigos. Siempre lo habíamos sido...
-¡Hoy hay una fiesta en casa de Darell! -exclamó Danielle.
-Ah, la diva de Darell, que parece un ángel -dijo Jack imitándola.
-Ya.... pero será divertido!! y si vamos todos no nos tendremos que ir con ella -explicó Danielle.
-¡Ay, yo quiero ir! -gritó Alison. Le encantan las fiestas.
Sonó el timbre.
-Ya lo hablaremos -dijo Marc.
De todas formas todo estaba claro: acabarían yendo.
Lizz se acercó a ella y le dijo al oído:
-Te espero en la fiesta.
Alex
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